25 junio, 2006

Despedida


La noche envuelve mis entrañas con su silencio. Un silencio sólo comparable con la soledad que has sembrado en mi corazón. La última mirada, el último roce, el último abrazo. Tan intensos como los primeros, pero a la vez tan definitivos.
Las nubes se mueven al compás de tus caderas para ocultar en tu rostro tu cruel abandono. Doblas la esquina y con ello maniatas mi alma. Mi dignidad, esperanza y cariño se arrastran entre las alcantarillas como un perrillo faldero para dejar hueco mi cuerpo.
Todo se ha acabado. Con la magia que apareciste rompes el encanto de mi felicidad. Palabras escudadas en un hipócrita cariño cortan de raíz la fuente de mis deseos. Deseos de una mujer que fue esperanza y ahora se transforma en quimera. Dos lágrimas recorren un rostro triste y compungido. Lágrimas secretas ultrajadas por la luz de la luna que transforma mi dolor individual en escarnio público de ladrones y prostitutas que juegan a equiparar el dolor de sus vidas con el mío. Lágrimas que parecen regar la primera flor que te regalé, o humedecer el primer beso que te di, pero que no hacen más que empujar el caudal de indeferencia que te separa de mí.
Partes ya, los charcos de orín y ginebra, en los que lo más jóvenes ahogan el mismo dolor que tú me impusiste, me dejan divisar por última vez tu silueta.
La noche se despeja para dejarme desnudo ante la jungla de la soledad. Soledad ruidosa, pues no hay dolor más cruel y tortuoso que escuchar los ruidos del eco de tu alma.
La noche y yo quedamos desnudas y desamparadas. Somos crápulas solitarios que buscamos en mil cuerpos el vacío que provocó uno sólo. Soy un drogadicto de tu presencia que busca su dosis de compañía en una esquina gobernada por chulos y camellos, igual que en la que tú me dijiste adiós.

Jorge Antonio Rico

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Jorge!!!! Por fin me estreno en tu blog!!!!
Me ha encantado la historia, la has escrito tú? está cargada de sentimientos duros pero dulces a la vez.... muy bonita, si señor.
Bueno pues decirte que a partir de ahora intentaré entrar más en tu blog y dejarte alguna que otra palabrita.
Muchísimos besitos a los beibis, y deciros que os echo de menos!!!!!
Hasta pronto.

Jorge Antonio Rico dijo...

Muxas gracias pishona!!!Es un honor ke seas ya habitante de mi blog. Tu comentario me ha hexo muxa ilusión.
Sí, el texto es mio. Y me lo inspiró un poema de Cernuda del mismo nombre que leí.
Yo también te exo tela de menos (y eso ke solo va un finde, oh!!! verano cruel, jajajaja). Pero las cosas tiernas ya te lo pongo esta tarde en un email.
Besos

Anónimo dijo...

Es precioso. Duro y dulce a la vez. Temeroso y valiente. Seguro que estas enamorados porque sabes describir muy bien el desamor.
Me ha encantado , tus palabras son puñales directo a mi corazón.
Es un placer haber descubierto un rinconcito como este donde se regala dosis de imaginación de alta calidad

Laura